Era mi primer viaje a Madrid sólo un 7-7-77 con motivo de (*) y el camino tenía premio por la radio del autobús de línea LA DOALDI.
Después del impacto de Hotel California y sus dos últimas e inquietantes estrofas (puedes despedirte cuando quieras, pero no lo podrás abandonar) podía suponerse que ahí se acababa el LP, pero bastaba dejarlo girar unos segundos y comenzaba a sonar esta joya (que no sonó en julio de 2009 en Madrid).
Estudiar francés durante el bachillerato me había servido fundamentalmente para pasar al curso siguiente, subsidiariamente me permitía entender moderadamente a Adamo, pero, superado COU y con Salvatore venido a menos, me vino a ver Joy Dasin que prolongó un verano más mi franco-interés! Bonjour!